quinta-feira, 15 de novembro de 2012


Quince años, una satisfacción y una certeza

Creo que un día tendré que escribir sobre la imaginación, esa dama misteriosa que nos hace viajar a los mejores y también los peores rincones de nuestra mente, nos hace felices, invencibles, casi sobrenaturales y  también nos sume en la tristeza, nos arroja al pozo de los miedos y nos recuerda que somos apenas seres humanos.

Fue mi imaginación guiada por mi conducta obsesiva de los últimos meses, la que me llevo a creer que esa situación tan temida ya había llegado. Pero no fue así, no fue así, no fue así y mi día cambio en un abrir y cerrar de ojos. De repente estaba feliz con la idea de celebrar la cena de 15 años.

Fue muy bien, mucho mejor de lo que podía imaginar. Sentí la emoción de los recuerdos que no quise y supe esconder. La verdad es que hasta hoy dos días después siento la emoción que me provocan mensajes recientes de mis antiguos compañeros de Barcelona que participaron en el proyecto.

Me llama la atención, por un lado la reacción de las personas que actualmente están en la empresa y que no participaron en aquella inauguración. Felicitando con sinceridad y alegría a aquellos que si lo hicieron y por otro lado me llama la atención la huella profunda que dejo en mis amigos de Barcelona (creo que a estos dos si puedo llamarlos así), llena de añoranza y de satisfacción.  Me llama la atención la alegría que muestran apenas por el hecho de haberme acordado de ellos. Estoy empezando a creer que no he dado valor a muchas de las cosas que he vivido.

Pero la mayor satisfacción la sentí al ver a las personas que estaban en la cena, como se divertían, como relacionaban las unas con las otras, como se sentían bien juntos. Estuve un tiempo callado observando y saboreando esa secuencia de imágenes y sintiendo la satisfacción por haber decidido conmemorar aquella fecha, también sentí en aquel momento y al día siguiente el calor  y cariño de las personas, lo que francamente me sorprendió.

Todo cambio en un abrir y cerrar de ojos, me vino una certeza, la de que la vida, es vida con ella, y que los mejores sentimientos están fuera de mi pequeño mundo. Los mejores momentos están en el mundo de las imperfecciones, lo impredecible, lo espontaneo, están en el mundo de los seres humanos y acompañado por ella.

Fue una noche inolvidable como debería estar previsto, pero lo mejor de la noche, sin estar previsto estaba por llegar.

 

Jules

 

terça-feira, 13 de novembro de 2012


Quince años y un fingimiento

Hoy es un día para recordar. No debería estar escribiendo ya que estoy bastante mal. Me había preparado para el día y  me temo que el día ha llegado, quizás cuando no lo esperaba. No sé cómo reaccionar, mis sentimientos hacia ella son muy fuertes y deseo más que nunca estar equivocado, no consigo entender mi vida sin ella y eso considerando las circunstancias es terrible.

Vamos a celebrar con una cena por todo lo alto los quince años desde la inauguración de nuestro primer complejo. Es una incógnita para mí lo que voy a hacer cuando 45 personas esperan de mi alegría y un pequeño discurso impregnado de emoción y optimismo.

Voy a tener que fingir alguna cosa que hoy no siento y separar mis sentimientos. Me hacía ilusión la celebración, pero ahora si pudiera lo cancelaría todo.

Creo que hasta la hora de la cena puedo centrarme un poco en el asunto y conseguir mostrar una imagen que me haga salir airoso, es importante para la gente que se sientan valorados. Es en esos momentos que mi posición privilegiada se hace más dura y solitaria. Es en esos momentos que siento su ausencia.

 

Jules

segunda-feira, 5 de novembro de 2012


Los sueños (Parte 2)

Es interesante ver como el paso del tiempo, entre otras cosas, actúan sobre nuestros sueños, los entierra, los modifica, los hace desaparecer cuando estamos demasiado  preocupados con e día a día, o cuando la vida nos da un revés. Pero nunca se olvidan totalmente. Basta ver por ejemplo un niño vestido con aquella camiseta del Barça, para que los sueños vuelvan y soñamos que nuestros hijos, sean capaces de alcanzarlos, a pesar de que no sabemos si por ellos o por nosotros.

Jugador del Barça fue el sueño más repetido por lo que a deportes se refiere, pero no fue el único durante años soñé con ser campeón olímpico prácticamente de todas las disciplinas deportivas, pero quizás con la que me quedaría seria con la de campeón olímpico de 10.000 metros. Siempre fui un corredor de fondo y la idea de dar tantas vueltas al estadio olímpico y que todo el mundo viera mi gran triunfo, era el sueño de los sueños.

También me vestí de amarillo en París, es la ropa que define al ganador del Tour de Francia y claro lo hacía tras ganar en solitario en alguna de las cumbres míticas de los Alpes o de los Pirineos. Soñé, ya más mayor, en repetidas veces con ganar Wimbledon, así como ser campeón del mundo de motos y de Fórmula 1.

Pero mis sueños no se limitan al mundo de los deportes, también los tuve en mi vida profesional, pero no muy lejos de los deportes. Quizás fue cuando me empecé a dar cuenta de que no conseguiría realizar ninguno de mis sueños deportivos y por lo menos podía estar cerca que aquellos que si lo iban a conseguir.

Mi sueño profesional fue entonces querer se periodista. No por el hecho de que me gustará escribir y sí por el hecho de que siempre quise tener la oportunidad de viajar y conocer lugares diferentes, cosa que conseguí, cuando menos me lo esperaba de otra manera. Soñaba con seguir los acontecimientos deportivos más importantes a lo largo y ancho del planeta, no pensaba mucho en como serian mis crónicas ni nada por el estilo, en mi sueño no había trabajo, solo viajes y espectáculos únicos.

Pero, ese sueño tampoco se realizo, a pesar de que llegue a me  pre- inscribir en la facultad de Ciencias de la información, el destino quiso que con 18 años y cuando la tasa de paro en España era alrededor de 25%, yo consiguiera, casi sin querer, un empleo que me permitía estudiar y con el que se vislumbraba la posibilidad de convertirme en un administrativo, con un salario fijo. Sucumbí a los consejos de familiares y decidí entrar en la facultad de Ciencias Empresariales y Económicas.

De todos los sueños que tuve, quizás los más intensos vienen de la parte artística, tanto de la música como del cine.

 En la parte musical, siempre quise aprender a tocar el piano, hasta compre un teclado hace unos años, pero no pase de tocar alguna que otra melodía de oído y después lo deje. Mi único contacto con la música fue como usuario. Gastaba gran parte de mi dinero comprando discos y hacia mis propias secuencias musicales, lo que me llevo a ser una vez el DJ de una fiesta en el Instituto donde cursaba BUP. Claro en una sala cerrada sin que nadie viese quien era el DJ, todos lo contrario a lo que sería hoy en día, en que los DJ’s se han convertido en auténticos personajes, cosa que no termino de entender muy bien.

En la parte cinematográfica, es donde está mi gran sueño artístico. No es que sea demasiado original, pero siempre soñé con ganar un Oscar al mejor director. Nunca pensé en ser actor que es mucho más glamuroso, probablemente porque para eso  uno no puede trabajar en la sombra y el desparpajo y si la timidez, nunca fue una de mis cualidades. Creo que también soñaba con ser Director por el hecho de ser más personal y creativo, la mente detrás de todo. A pesar de mi amor incondicional al cine nunca hice el más mínimo intento para me aproximar a ese medio, a pesar de que tuve contacto con algunas personas del mismo.

Seguro que tuve más sueños que ahora no recuerdo, pero esos son los más importantes, excepto mi último sueño. Ella es mi sueño, el más importante de mi vida. El único que no es individual y el único que creo que puedo hacer realidad. Últimamente mis sueños están con ella, cuando sueño que en un bar cualquiera, una noche y sin ella saber que estaré allí,  toco un solo de guitarra y ella se enamora de mí, cuando está a mi lado en el momento de recibir un Oscar y claro mi discurso emocionado es para ella, cuando gano un pequeño torneo de tenis de aficionados, cuando planeamos el futuro, cuando el sábado existe, cuando el domingo existe, cuando siempre cuando.

Aprendí que el sueño más importante es poder amar y ser amado y que ha llegado el momento de definitivamente intentar con todas mis fuerzas realizar mi sueño.

 

Jules

sábado, 27 de outubro de 2012


Los sueños (Parte 1)

 

Durante los últimos dos meses he estado muy mal, nunca en toda mi vida me había sentido tan mal, tan solo y  tan triste. Prácticamente no he podido hacer nada y ni siquiera la anestesia temporal que pensaba que sería mi viaje a México ha funcionado. He perdido toda mi capacidad de control y me he dado cuenta de que era y todavía soy víctima de una obsesión. Una obsesión que dicta todos y cada uno de mis actos. La obsesión de no conformarme con su ausencia y de preguntarme, donde y con quien estará

Ahora estoy mejor y es por eso que intentaré escribir algunas líneas, entre otras cosas porque ahora tengo una lectora. Aquella que siempre quise tener cuando una noche de triste recuerdo, en un túnel oscuro empecé a pensar en la idea de lanzarme a la red. Si es ella, pero no voy a contar todavía como ella llego hasta Jules.

La verdad que decidí ponerme en movimiento entre otras cosas porque me di cuenta que había perdido aquello que siempre me acompaño y que Shakespeare definió como del material del los humanos que estamos hechos, los sueños.

Creo que no hay nada peor que perder la capacidad de soñar y en ese momento hay que reaccionar, muchas veces creando un nuevo sueño y otras decidiendo luchar por aquel que un día, después de haber estado ciego nos damos cuenta que es el sueño de nuestras vidas.

Durante mi vida he tenido muchos sueños, pero ninguno como el que ella representa.

 Creo que mi primer sueño debe haber sido aquel que no te deja dormir la noche del 5 de Enero, los Reyes Magos de Oriente. Nunca quise aceptar lo que mucha gente dice, que es que no existen, en ese punto voy a ignorar sus consejos. Puede que no sean como los imaginábamos al principio, pero de alguna manera existen.

Otro de los sueños de mi infancia, fue como no ser jugador de futbol profesional y claro jugar en el Barça. Es el sueño de casi todos los niños de mi tierra. La verdad es que lo intenté. Durante unos años el Barça publicaba un formulario en los principales periódicos deportivos de la ciudad para que los niños de cierta edad se inscribieran para hacer una prueba. Casi como un deber militar cuando llegó mi edad me presente a las pruebas. Fue muy rápido, jugué bien, pero quise ser un jugador de equipo, pensando que aquellos técnicos del Barça se darían cuenta de mis habilidades, pero me equivoque, para eso hay que ser más atrevido e intentar destacar rápidamente. Unos días después llego una carta que mi padre me entrego,  en ella se agradecían mis esfuerzos pero me negaba el que entonces creía que era el mejor y más grande sueño que iba a tener en mi vida. Ese sueño no fue solo mío, la carta que mi padre me entrego estaba abierta, lo entiendo, pero no me gusto.

 

Jules

terça-feira, 14 de agosto de 2012


Nostalgia

Hace tiempo que no escribo. Pienso en hacerlo constantemente, me vienen a la cabeza muchas ideas, sentimientos y recuerdos que no siempre son compatibles para ponerlos en el mismo texto. Creo que voy a tener que organizarme de alguna manera para algunas cosas no se pierdan en el olvido, mi menoría está fallando más de la cuenta, excepto en aquello recuerdos que se refieren a ella que parecen estar escritos en mi menta con tinta indeleble, así como la nostalgia que siento.

Ella continua en mi pensamiento he viajado últimamente y la he echado mucho de menos, la cicatriz no termina de cerrarse, creo que no lo hará nunca. Sé que tengo que hacer un esfuerzo para desligarme de ella, pero no lo consigo. La tecnología nos acerca pero también nos hace sufrir. Tengo la impresión que soy un enfermo terminal que se mantiene vivo gracias a una conexión y que es incapaz de tomar la decisión de desconectarse, aferrándose a la vida como a un clavo ardiendo.

No consigo hacer casi nada que sea utilizar mi cerebro, imposible leer un libro, imposible escuchar muchas canciones, imposible ver casi ninguna película, especialmente películas Brasileñas, imposible ir a ciertos lugares …….

Ayer me di cuenta que el último libro que empecé cuando  todavía estábamos juntos “El cementerio de Praga” de Umberto Eco pasará a mejor vida como una lectura inacabada, así como tantas otras cosas a lo largo de mi vida.

En los últimos días también me ha dado cuenta que no consigo escuchar casi ninguna de las canciones de mi admirado Joaquín Sabina, a pesar que “ Así estoy yo sin ti” es la que mejor define mis sentimientos de hoy.

             Extraño como un pato en el Manzanares,
             torpe como un suicida sin vocación,
            absurdo como un Belga por soleares
 vacío como una isla sin Robinson,
            oscuro como un túnel sin tren expreso
            negro como los ángeles de Machin
            febril como la carta de amor de un preso…..
            así estoy yo, así  estoy yo, sin ti.
           Perdido como un quinto en día de permiso,
           como un santo sin paraíso,
           como el ojo del maniquí,
           huraño como un dandy con lamparones,
           como un barco sin polizones ….
           así estoy yo, así estoy yo, sin ti.

          Más triste que un torero
          al otro lado del telón de acero.
          Así estoy yo, así estoy yo sin ti.

         Vencido como un viejo que pierde al tute,
         lascivo como el beso del coronel,
         furtivo como el Lute cuando era el Lute,
         inquieto como un párroco en un burdel
         errante como un taxi por el desierto,
         quemado como el cielo de Chernovil,
         solo como un poeta en el aeropuerto…
         asi estoy yo, asi estoy yo, sin ti.

        Inútil como un sello por triplicado,
        como el semen de los ahorcados,
        como el libro del porvenir,
        violento como un niño sin cumpleaños,
        como el perfume de un desengaño….
        así estoy yo, así estoy yo sin ti.

        Más triste que un torero
        al otro lado del telón de acero.
       Así estoy yo, así estoy yo sin ti.

        Amargo como el vino del exiliado,
        como el domingo del jubilado,
        como una boda por lo civil,
        macabro como el vientre de los misiles,
        como un pájaro en un desfile …..
        así estoy yo, así estoy yo sin ti.

        Más triste que un torero
        al otro lado del telón de acero.
       Así estoy yo, así estoy yo, sin ti.

El domingo pasado acabaron las Olimpiadas de Londres y pensé en escribir lo que más recordaba de cada una de ellas, creo que lo haré en breve, lo único que puedo anticipar es que cuando llegué a Pekín 2008, me falto el aire……

Jules

terça-feira, 19 de junho de 2012


Vamos a ver (…)



Hoy es un día especial, por mucho que intente convencerme  que no lo es, si lo es. Hace tiempo que deje de celebrar mi cumpleaños. Fue el día que cumplí 30 años pero en el fondo si me hace ilusión, aunque mucha menos que a la mayoría de las personas.

Hace unos días, como no en un fin de semana, estaba mirando el mar azul en un bonito día de otoño, cerré los ajos e imagine que cuando los abriría todo sería diferente, pero no fue así porque ella continuaba no estando allí, fue apenas un sueño.

Lo paso especialmente mal los sábados, son muy tristes, duelen y creo que tendrá que pasar bastante tiempo para que no sienta dolor y que es muy probable que lo peor todavía este por llegar.

Esta semana he tenido esa sensación. La sensación de que todo esto es un sueño. Un sueño que comenzó hace casi 16 años y que se acabará el día que vuelva a mis orígenes. Esta sensación se ha visto agravada por unas fotos que he visto de mis antiguos compañeros de clase de EGB. La impresión que he tenido al verlos mucho más viejos, es que yo estoy en otro lugar que me hace estar más joven y que el día que vuelva me encontraré con una realidad diferente.

Creo que todo esto me pasa por el hecho de haber vivido casi 5 años en el limbo, a veces en el paraíso y otras en el infierno. El paraíso es ella y el infierno son mis indefiniciones e temores. Temores a despertar del sueño más hermoso de mi vida. Del único que me ha dado vida y me ha mantenido más joven.


Jules

terça-feira, 29 de maio de 2012


Vamos a ver

Bueno aquí estamos, intentando continuar este viaje, tan personal como incierto. La verdad es que he tenido muchas dudas de cómo continuar. Es posible que todavía las tenga, pero hay que ponerse en marcha. No sé muy bien como esto va a continuar pero creo que, por lo menos de momento  me dejaré  llevar por las emociones y sentimientos del momento.

Hoy estoy mejor. Pase unos días complicados durante el fin de semana de 19 y 20 Mayo. Se completaron dos meses sin verla y creo que mi subconsciente me juega malas pasadas. Creo que tengo que pasar por esa fase, no me es desconocido y me recuerda la primera vez que estuve tanto tiempo fuera de lo que hasta hoy llamará “mi casa”, o sea  la casa de mis padres, me sucedió algo parecido. A partir de los dos meses uno empieza a sufrir con las ausencias y echa mano de los recuerdos para reconfortarse.
Inevitablemente me recuerda a aquella mañana de un 31 de Julio en que comenzó el viaje más largo de mi vida. Recuerdo que mi padre se despidió de mí de manera rápida cuando yo todavía estaba medio dormido. No recuerdo como fue la despedida con mis hermanos. Puedo imaginar, pero sinceramente no tengo esa imagen gravada en mi cabeza. Pero lo que nunca olvidare fue la despedida de mi madre. Fue en la esquina de casa, cuando cogía el taxi para el aeropuerto que entre algunas lagrimas de caían lentamente por sus mejillas, me dijo “ves con cuidado”. Es curioso ya que hasta ese momento la despedida había sido bastante contenida, casi diría que no parecía que me iba a vivir (en aquel entonces por dos años) al otro extremo del mundo.

Creo que el entusiasmo que me embargaba, me hizo  que hasta ese momento no fuese muy consciente de lo que estaba haciendo y cuál era el efecto que mi decisión podía tener en mi familia.
De ese día también guardo el recuerdo de la siguiente anotación que hice en la agenda Finocam 602, de 6 anillas que todavía conservo:
 Bien, por fin llego el día. Hoy es el primer día de mi nueva vida y de momento empieza con retraso ya que el vuelo a Roma en estos momentos acumula 40 minutos de retraso.
Estoy sentado y me vienen a la cabeza imágenes de los últimos momentos en Barcelona. Al final han sido 45 minutos y vuelvo a tomas el bolígrafo para dejar constancia del momento en que vivo. Al final no ha sido tan emocionante ya que he tenido suerte y casi no ha habido lagrimas. Quizás en estos momentos la imagen que más me emociona, es como no la de mi madre, a pesar de que ya lo sabía, pero ese “ves con cuidado” entre lágrimas me ha emocionado.

No estoy muy seguro de mi futuro, pero si estoy seguro que mi decisión de ir a Brasil es la más acertada. Sé que será duro ya que me doy cuenta de que F no va a ser muy solidario. En estos momentos yo vuelo en turista y é en business ya que sólo había una plaza y la ha cogido él.

Hay muchas cosas que me hubiera gustado hacer, como despedirme de gente que ahora me doy cuenta que he olvidado y cosas que debería haber hecho. Pero ahora debo mirar hacia adelante a pesar de saber que mi pendencia natural me trasladará al pasado en muchas ocasiones.

Me equivoque F fue un buen compañero de viaje. Trabajamos juntos durante más de dos años y compartimos apartamento durante más o menos 8 meses. Hoy 15 años después todavía tenemos relaciones y nos hablamos y vemos por negocios. Puede ser que algún día escriba un capítulo dedicado a F.

Jules